Por Margarita Girón
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Jóvenes, madres con bebés en brazos, adultos mayores y niños, así se observó caminar a los migrantes hondureños por las calles y carreteras de Guatemala durante esta semana. Iban en bloques de entre quince y veinte personas, con bolsas de plástico y maletas pequeñas al hombro, llenas de esperanza en busca de un futuro mejor.
Así vivió Guatemala el éxodo hondureño hacia los Estados Unidos y que según consultados, evidencia que las poblaciones del Triángulo Norte sufren de distintas problemáticas, como la corrupción, violencia, falta de oportunidades e ingresos que los empuja a buscar el llamado “Sueño Americano”.
En la Segunda Conferencia para la Prosperidad y Seguridad en Centroamérica, celebrada recientemente en Washington D. C., el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, aseguró que “La migración de Guatemala ha aumentado en un 75 por ciento”. Asimismo, señaló que la cantidad de personas originarias de Honduras ha subido un 61 por ciento.
De acuerdo al diputado Jean Paul Briere, quien ha presidido la Comisión del Migrante, la crisis y el éxodo migratorio que experimentan los países del Triángulo Norte, pero especialmente Guatemala es consecuencia de la corrupción. Según el parlamentario, los recursos económicos que debieran ser utilizados para atender las necesidades de la población muchas veces tienen otros destinos.
Briere acotó que los países son iguales en idiosincrasia y liderazgo político, sin embargo, la diferencia entre los motivos que llevan a los ciudadanos a migrar es que tanto en El Salvador y Honduras, la causa principal es la inseguridad y en Guatemala los motiva la búsqueda de una mejor calidad de vida.
Asimismo, indicó que muchos de los recursos que tendrían que ser destinados para los servicios básicos para la población como la salud, seguridad y educación, no están llegando por parte del Estado y al final eso conlleva a que la gente piense migrar.
“Cientos de guatemaltecos salen diariamente hacia Estados Unidos porque el mayor miedo del ser humano es el hambre y las personas harán lo que esté en sus manos para alcanzar las condiciones de vida que el Estado ha sido incapaz de darles”, señaló el diputado.
Además, agregó que en Guatemala no existen planes en el Gobierno actual que incluyan el tema migratorio, y es responsabilidad de las próximas autoridades definirlo. A la vez, mencionó que como país y sociedad, los guatemaltecos deben unirse para dar soluciones a la migración irregular.
“EN HONDURAS NO HAY TRABAJO”
Luis Enrique Ramírez llegó recientemente a la capital en compañía de su esposa y sus dos hijos. Ramírez relató que en Honduras laboró como agente de seguridad pero perdió el trabajo y llevaba varios días sin poder encontrar uno nuevo.
El migrante explicó que la situación en Honduras es difícil, por eso cuando escuchó sobre la caravana decidió unirse y emprender el viaje, “en Honduras no hay trabajo estamos arruinados, no se puede vivir”, dijo el Ramírez.
Héctor, originario de San Pedro Sula, quien salió hace unos días rumbo a Estados Unidos, dijo que “los gobernantes deben enfocarse más en la pobreza… la mayoría de Presidentes son títeres de las empresas privadas y se ayudan entre ellos adueñándose de la riqueza y haciendo al pobre más pobre”.
El hondureño señaló que aunque tengan la capacidad de trabajar en Honduras, no existen las condiciones para salir adelante porque no hay ni educación ni salud de calidad. También indicó que la ayuda que dan los gobiernos en su mayoría es con fines políticos y no para ayudar al pueblo.
Ante los rumores que afirman que los migrantes han sido manipulados, el presbítero Mauro Verzeletti dijo que “en la necesidad humana, en la violencia y en la pobreza no puede haber manipulación”.
Durante el trayecto de los migrantes que buscaban salir de la ciudad, algunos guatemaltecos hicieron sonar las bocinas de sus vehículos alentando a los hondureños a continuar. Mientras la caravana avanzaba por un carril del Periférico, un taxista detuvo la marcha para compartir alimentos con los hondureños, que a pesar de las inclemencias del tiempo caminaban por la vía.
El padre Verzeletti, director de la Casa del Migrante, informó que todo el grupo que se alojó el miércoles en el refugio se marchó durante la madrugada del jueves. Sin embargo, durante el día más migrantes llegaron en busca de alimentos y descanso temporal.
La antropóloga Aracely Martínez, autora del libro “Yo Migrante”, se refirió a la caravana como un acto desesperado, de las personas que buscan nuevos caminos porque en sus países ya no tienen nada que puedan hacer.
Martínez dijo que si las condiciones en Guatemala no cambian y no se busca una solución integral al tema migratorio, el próximo éxodo será de guatemaltecos. “Sabemos que hay al menos 2 millones de guatemaltecos que se han desplazado y esa es una caravana a cuenta gotas que se ha visto durante los últimos diez años”.
ALGUNOS DECIDIERON NO CONTINUAR
Germán Ramírez junto con tres amigos salieron ayer de Copán, Honduras esperando alcanzar a la caravana, sin embargo, ha desistido de continuar el viaje. Los cuatro hondureños indicaron que se dedican a la agricultura, sin embargo, el temor los ha hecho reconsiderar el viaje.
Ramírez relató que en Honduras lo espera su esposa y sus cuatro hijos, aunque pensaba llegar a Estados Unidos, sus compañeros de viaje desistieron y no se atreve a continuar solo la travesía.
Los hondureños llegaron a la Casa del Migrante en busca de ayuda para volver a su país pese a las necesidades que viven en el país vecino.
En apoyo a Casa del migrante, guatemaltecos se han acercado con ayuda humanitaria para los migrantes hondureños. El jueves, una mujer que se dedica a vender alimentos dijo que se había conmovido con la caravana porque tiene un hijo que vive en Estados Unidos y conoce las necesidades que obligan a las personas a migrar.
Según el Padre Verzeletti, en las diferentes sedes de Casa del Migrante en Guatemala, se ha atendido al menos a 1 mil personas en los últimos 3 días y según se ha informado, el flujo de migrantes hondureños continuará en los próximos días.
MPI: SON MOTIVADAS A MIGRAR POR FACTORES DE VIOLENCIA, POBREZA E INESTABILIDAD POLÍTICA
Ariel Ruíz del Instituto de Política Migratoria en Washington D. C. (MPI, por sus siglas en inglés), refirió que se puede interpretar que estas personas son motivadas a migrar por factores que tienen que ver con violencia, pobreza y el clima y el factor político además de la inestabilidad que tiene Honduras en estos momentos.
“Es importante recalcar que esta no es la primera caravana que sucede en la región y la más reciente fue en abril y han pasado unas antes, pero el factor o lo que distingue a la Caravana pasada es la atención que se le ha prestado en medios de comunicación en Estados Unidos, México y otros países además de la cantidad y la manera que está creciendo”, dijo.
Otra de las implicaciones a decir del entrevistado, también tiene que ver con el panorama político electoral en Estados Unidos.
“Este tipo de inmigración ya no es invisible, tiene que haber más detalladamente soluciones locales, estatales y regionales para abordar las causas de migración que están ocurriendo… en estos momentos si no quedaba claro antes ahora sí lo es y ya no se puede ignorar los flujos de migración hacia Estados Unidos”, comentó.
El experto añadió que las cifras reflejan que Guatemala es el país de Centroamérica que más migrantes sigue enviando hacia Estados Unidos e incluso en México la cifra de detenidos es similar.
“Algo específico está sucediendo en Guatemala que está motivando a la gente a arriesgarse a Estados Unidos, pero es difícil tratar de saber si fue una política, un cambio climático, o fue el factor de inestabilidad política o inseguridad”, afirmó.
Sin embargo, los factores de pobreza, falta de oportunidades, violencia doméstica, la inestabilidad política, están vinculados a grandes movilizaciones.
Por otro lado, destacó que México ha deportado a más personas centroamericanas desde 2015, incluso en niveles superiores a los registrados por Estados Unidos.
“Ciertamente las amenazas del presidente Trump están basadas en que los países no están haciendo lo suyo para impedir el tránsito de migrantes, pero México ciertamente ha hecho su control de migración rígido”, opinó.
INTENTAN CRUZAR MÉXICO
La agencia de noticias Associated Press (AP) informó que unos 3 mil integrantes de la caravana de migrantes se dirigen hacia México, en donde en su intento por cruzar derribaron el viernes una valla fronteriza en Guatemala y algunos que lograron cruzar un puente hacia México se enfrentaron con policías en la frontera.
La publicación destaca que las balsas que normalmente transportan a multitudes de personas a través del río fronterizo Suchiate trasladaban principalmente mercancías. Según informaron, los operadores de las balsas dijeron que las autoridades mexicanas les habían advertido que no transportaran personas.
Asimismo, explicaron que el gobierno mexicano ha dicho que los migrantes serán atendidos conforme a la ley y con respeto a sus derechos humanos. De acuerdo a las autoridades, quienes tengan pasaporte o visa podrán entrar y los que presenten solicitudes de refugio serán atendidos. Los que infrinjan la ley serán deportados.
*Con información de Grecia Ortiz.