Por Eder Juárez
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Julia González, de la Mesa Nacional para las Migraciones en Guatemala (Menamig), estimó que este año han desaparecido 393 guatemaltecos migrantes, según denuncias y registros no oficiales.
De acuerdo con González, la situación es dramática por todas las violaciones de derechos humanos a las que se exponen los migrantes, que van desde extorsiones, violencia sexual, pero lo más dramático son los asesinatos y las desapariciones.
“No hay datos concretos de denuncias, hay poco interés de las autoridades federales y estatales en México para iniciar una investigación que permita aclarar y alcanzar la verdad, el 22 de agosto se cumplieron 8 años de la masacre de San Fernando, Tamaulipas, México, sin que existan resultados que permitan aclarar si autoridades o funcionarios están involucrados en estos crímenes”, señaló la activista.
Asimismo, indicó que es en México donde más se violentan los derechos humanos de los migrantes centroamericanos. En el caso de las desapariciones de migrantes en el territorio nacional, datos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala, señalan seis personas desaparecidas de otras nacionalidades, sin que exista mayor información al respecto, manifestó González.
PREOCUPACIÓN
Por su parte, la Procuradora Adjunta I, Miriam Roquel, indicó que la situación de los migrantes es de suma preocupación, porque están siendo víctimas de diversos hechos que conllevan incluso la desaparición.
Roquel aseguró que por la falta de denuncia de las personas no se tienen datos estadísticos exactos que reflejen la situación de los migrantes desaparecidos. Asimismo, coincidió con González de que es México donde más desapariciones se dan y recordó también la masacre donde perdieron la vida 72 migrantes de diferentes nacionalidades.
Además, indicó que se está tratando de unificar esfuerzos con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de México que también dan el acompañamiento por la violación de Derechos Humanos, para que puedan velar en que se dé justicia para las víctimas.
RECUERDAN A FAMILIARES
Colectivos, asociaciones y organizaciones de familiares de migrantes desaparecidos y ejecutados, recordaron la masacre ocurrida en agosto de 2010 en San Fernando, Taumalipas, y pidieron justicia a las autoridades por este hecho violento contra los migrantes.
Según los familiares de las víctimas no existe ninguna sentencia, tampoco una reparación integral del daño para las familias y las investigaciones no han dado resultados, ni significativos avances para esclarecer los hechos, ni las causas que lo motivaron.
“El Estado mexicano tiene una enorme deuda con las víctimas de estos crímenes. Los familiares de quienes fueron masacrados han insistido constantemente y exigen justicia, sin embargo, constantemente se les ha negado, uno tras otro, sus derechos”, manifestaron.