Factor Méndez

fmendez21@gmail.com

Defensor Derechos Humanos. Catedrático. Periodista/Escritor. Estudió Derecho, Derechos Humanos y Trabajo Social en Guatemala, Honduras y Costa Rica. Catedrático San Carlos y Rafael Landívar. Fundador Centro de Investigación, Estudios y Promoción de Derechos Humanos CIEPRODH. Autor de ensayos y artículos sobre temas sociales, políticos, memoria histórica y Derechos Humanos.

post author

Factor Méndez Doninelli

“La eliminación de la pobreza no es un gesto de caridad. Es un acto de justicia.”
-Nelson Mandela. 1918-2013.

En noviembre de 2009, cuatro años antes de su muerte, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 18 de julio de cada año como el Día Internacional de Nelson Mandela, para conmemorar al símbolo de la lucha anti apartheid, expresidente de Sudáfrica, Premio Nobel de la Paz. El reconocimiento de Naciones Unidas a Mandela, es por la contribución que hizo en vida para promover una cultura de paz y de libertad en todo el mundo. El pasado miércoles 18, se conmemoró el centenario de su nacimiento.

La resolución 64/13 de dicha Asamblea General, reconoce que Mandela se entregó,… “al servicio de la humanidad en la solución de conflictos, las relaciones interraciales, la promoción y protección de los derechos humanos, la reconciliación, la igualdad entre los géneros, los derechos de los niños y otros grupos vulnerables, así como la lucha contra la pobreza y la promoción de la justicia social”.

Naciones Unidas recuerda que en su trayectoria de vida, durante 67 años Nelson Mandela sirvió a la humanidad en varios espacios, como abogado defensor de derechos humanos, como preso de conciencia denunciando al régimen del apartheid, como Premio Nobel de la Paz promoviendo la paz, como primer Presidente elegido democráticamente en Sudáfrica, luchando a favor de los excluidos y discriminados.

En la larga lucha de resistencia contra la política del apartheid, Mandela fue perseguido, reprimido y encarcelado, condenado a cadena perpetua, cumplió 27 años de prisión en completo aislamiento. La presión nacional e internacional contra el régimen sudafricano de minoría blanca, logró que fuera puesto en libertad. Ya libre, continúo la lucha contra el apartheid hasta lograr que fuera eliminado, por ello recibió el Nobel de la Paz y posteriormente fue elegido Presidente de su país.

La erradicación de la perversa política del apartheid en Sudáfrica cambió al país, la mayoría de la población recuperó sus derechos y libertades que antes les negaba el régimen segregacionista y opresor. Las condiciones de vida de la gente de raza negra mejoraron. El cambio social sustantivo ocurrido en ese país, fue resultado de la tenaz lucha de Mandela y del Congreso Nacional Africano (CNA), brazo político de la resistencia.

Nelson Mandela o “Madiba”, como popularmente se le conoció, falleció a la edad de 95 años, el 5 de diciembre de 2013.

Durante los actos por el centenario, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, pidió que los valores por los que luchó Mandela, como la paz o el perdón, no se conviertan en «ideales vagos» sino en «acciones concretas que todos podamos llevar a cabo».

La ministra de Medio Ambiente sudafricana, Edna Molewa, recordó que, si Mandela viviese, no vería su sueño cumplido porque los ciudadanos negros siguen discriminados de facto.

«Su legado no puede ser separado de la necesidad de alcanzar una emancipación real, y esta es la liberación económica», dijo Molewa, quien ve la lucha de Mandela como el inicio de una larga batalla por librar.
Mandela es un ícono de la humanidad, un paradigma en las luchas de resistencia de los pueblos, un líder de su Nación que contribuyó a derribar el muro del racismo y la discriminación, un símbolo de paz y de resistencia pacífica, otro de los gigantes del siglo XX.

Artículo anteriorPorras reitera su preocupación a Degenhart por retiro de PNC a CICIG
Artículo siguiente“80 años” (IV)