ASUNCIÓN
Agencia (AP)

El presidente paraguayo Horacio Cartes retiró hoy su renuncia al cargo que había elevado al Congreso tras no reunir los votos necesarios para jurar como senador.

El mandatario fue elegido el 22 de abril legislador por el oficialista Partido Colorado pero debía dimitir antes de juramentarse porque la Constitución prohíbe ejercer dos funciones públicas al mismo tiempo.

«Veo con gran pena que algunos legisladores no desean que se cumpla la voluntad popular del 22 de abril, por lo que retiro mi renuncia al cargo de presidente de la república», escribió en su cuenta de Twitter.

Darío Filártiga, uno de los asesores políticos del jefe de Estado, dijo a periodistas que la banca de Cartes será ocupada por Rodolfo Friedmann, del mismo partido pero disidente del movimiento interno liderado por Cartes.

El mandatario debe entregar el mando el 15 de agosto a su sucesor y correligionario Mario Abdo Benítez.

Para el analista político Ignacio Martínez, «Cartes se equivocó de estrategia porque renunció el 28 de mayo último creyendo que el Congreso aprobaría su dimisión, incluso consiguió que una exministra de la Corte Suprema de Justicia fuera nombrada vicepresidente».

Pero anticipó que el mandatario no se quedará con los brazos cruzados y que es probable que un día después de entregar el poder “volverá a intentar jurar como senador porque es evidente que su objetivo es tener fuero parlamentario por si se presentasen denuncias penales en su contra», explicó Martínez a The Associated Press.

Antes de convertirse en presidente Cartes construyó una fortuna familiar con dos docenas de empresas que van desde la banca hasta el tabaco pasando por las bebidas gaseosas y el fútbol que, supuestamente, transfirió, según dijo a AP en 2013 tras asumir el cargo.

Versiones de prensa no confirmadas indican que Cartes acumuló riqueza a través del lavado de dinero del contrabando de cigarrillos y el tráfico de drogas, pero nunca fue denunciado formalmente.

Cartes es el tercer presidente que renunció al cargo desde 1989: el primero fue el dictador Alfredo Stroessner en 1989 durante un golpe de Estado y el segundo fue Raúl Cubas en 1999 tras los disturbios que siguieron al asesinato de su vicepresidente Luis María Argaña.

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