Buenos Aires,
Agencia dpa

La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, reaparecerá el próximo martes en un acto oficial luego de permanecer ausente de la escena pública durante tres semanas por problemas de salud, informaron hoy fuentes oficiales.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo que «está contemplado» que la mandataria participe el martes en la clausura de la Convención Anual de la Cámara de la Construcción.

«La Presidenta efectúa un trabajo en forma regular desde la Residencia de Olivos, pero lo hace también en el marco del reposo oportunamente recomendado por sus médicos», dijo el funcionario.

La jefa de Estado cumplió el último martes los diez días de reposo que le indicaron los médicos tras permanecer una semana internada por un cuadro de inflamación intestinal.

La ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, aseguró unos días atrás que la mandataria habla «permanentemente» con funcionarios del gobierno, en medio de su recuperación del cuadro de sigmoiditis que la afectó.

«Cristina está muy bien, estamos hablando permanentemente todos los ministros” con ella, había dicho la funcionaria y cuñada de la jefa de Estado.

Fernández de Kirchner realiza sus actividades en la Residencia presidencial de Olivos, en la zona norte del Gran Buenos Aires, donde guarda reposo.

La presidenta, de 61 años, reanudó la actividad oficial el miércoles de la semana pasada, mientras cumplía reposo por un cuadro de infección del colon. No participó de la Cumbre del G20 que se realizó en Australia porque sus médicos le prescribieron diez días de reposo tras salir el domingo 9 de noviembre de la clínica en la que estuvo internada.

La mandataria estuvo una semana internada en la clínica privada Otamendi de la capital argentina por un cuadro de sigmoiditis que le produjo fiebre alta y dolores abdominales, entre otros síntomas.

Varios funcionarios aseguraron que la mandataria siguió gobernando desde la clínica, aunque versiones de prensa indicaron que en sus días de ausencia su hijo Máximo Kirchner había sido la persona de consulta a la hora de tomar decisiones.

Este no es el primer episodio de salud que sufre la presidenta, que a mediados de octubre pasado suspendió un acto programado para cumplir con dos días de reposo debido a un cuadro de faringitis.

 

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