Edith González

Date a los demás. Dona sangre. Comparte vida.
Lema campaña 2018. OMS

Para agradecer a los donantes voluntarios no remunerados y hacer conciencia de donar regularmente para garantizar la calidad, seguridad y disponibilidad de sangre y sus productos se celebra este día.

Las transfusiones de sangre salvan millones de vidas cada año. Contribuyen a que pacientes con enfermedades potencialmente mortales vivan más tiempo con mejor calidad de vida, y posibilitan la realización de intervenciones médicas y quirúrgicas complejas. Cumplen función vital en la atención materno infantil y respuestas de emergencia a los desastres naturales o causados por el hombre.

Los servicios que permiten acceder a sangre y productos sanguíneos seguros en cantidades suficientes son un componente clave de los sistemas de salud eficaces. Solo se puede asegurar un suministro suficiente mediante donaciones regulares voluntarias y no remuneradas. En muchos países los servicios de salud tienen problemas para ofrecer sangre suficiente y garantizar su calidad y seguridad, OMS.

El tema de la campaña de este año es que la donación de sangre es un acto solidario. Destaca valores humanos fundamentales: altruismo, respeto, empatía y generosidad, que están en la base de los sistemas de donación voluntaria y no remunerada. Hemos adoptado el lema “Date a los demás. Dona sangre. Comparte vida” para llamar la atención hacia el papel que tienen los sistemas de donación voluntaria a la hora de cuidarnos unos a otros y crear lazos sociales y una comunidad cohesionada.

La campaña tiene por objeto agradecer a quienes han salvado la vida de otros donándoles sangre y busca motivarles para que sigan donando a la vez de alentar a quienes que nunca han donado.

Diariamente, se donan en el mundo más de 80 millones de unidades de sangre, sólo el 38% de estas unidades son recolectadas en países en desarrollo, donde vive el 82% de la población mundial. Muchos países dependen aún de la donación de familiares o amigos de pacientes que requieren sangre; y en muchos otros, todavía se llevan a cabo donaciones pagadas.

Las evidencias demuestran que los donantes voluntarios presentan niveles más bajos de infecciones transmisibles por transfusión. Por lo que son la base de sistemas de suministro de sangre suficientes y seguros. Una base estable de donantes voluntarios no remunerados que donan sangre con regularidad permite garantizar un suministro fiable y suficiente de sangre no contaminada.

El perfil de edad de los donantes de sangre muestra que, en los países de ingresos bajos y medios hay, proporcionalmente, más personas jóvenes que donan sangre que en los países de altos ingresos. La información demográfica sobre los donantes de sangre ayuda a diseñar los programas de selección y hacer un seguimiento de los donantes.

La OMS, ha registrado aumento significativo de las donaciones de sangre voluntarias no remuneradas en los países de ingresos bajos y medios.

Atrévase a salvar una vida, done sangre, done vida.

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