Eugenio R. Fernández
picandopiedragt@gmail.com
Según medios de comunicación el Presidente de Guatemala General Otto Pérez Molina ha insistido en la tercerización de la recaudación tributaria, según las fuentes él afirmó: “Yo le estoy exigiendo a la SAT no solo hacer la reingeniería, sino que si es necesario que contrate empresas que le ayuden a hacer el trabajo, que lo hagan”.
Empecemos diciendo que en las afirmaciones del presidente existe al menos una ilegalidad: La SAT es supuestamente ente autónomo según el Artículo 1 del decreto que creó la propia SAT el cual indica: “ARTÍCULO 1.- Creación. Se crea la Superintendencia de Administración Tributaria, como una entidad estatal descentralizada, que tiene competencia y jurisdicción en todo el territorio nacional para el cumplimiento de sus objetivos, tendrá las atribuciones y funciones que le asigna la presente ley. Gozará de autonomía funcional, económica, financiera, técnica y administrativa, así como personalidad jurídica, patrimonio y recursos propios.” Que parte de la descentralización y la autonomía no entiende el Sr. Presidente.
Lo que el General puede hacer, es destituir al Superintendente por no cumplir con las metas de recaudación, pero eso es complicado ya que fue la Vicepresidenta quien nombró a la Intendente de Aduanas que es donde se encuentra el agujero más grande de la recaudación del Estado. Más o menos entre 12 y 15 mil millones de quetzales en defraudación aduanera según análisis del Conacom
Me cae mal que solo se vea al tributario para seguir sangrándolo más. Lo digo porque la propia vicepresidenta Baldetti afirmó en medios de comunicación que se pierden anualmente en corrupción más de 15 mil millones de quetzales al año, eso sin contar con la defraudación aduanera.
Y por aquí viene mi propuesta. Yo le acepto la tercerización de la recaudación a cambio de tres tercerizaciones. La primera de contraloría de cuentas para que una empresa externa audite todos los estados patrimoniales de las altas autoridades de los tres poderes del Estado. Solo para comprobar que nada se ha ido por allí. La segunda tercericemos la fiscalía de delitos económicos para que realmente se investigue el contrabando aduanero. En esa fiscalía según la papelería que presentó la dirige un señor de dudosa reputación que a propósito es de los magistrados electos que no han podido tomar posesión. El propósito de la segunda tercerización es que se le entre al tema del contrabando aduanero de verdad. El tercero sería la fiscalía contra la corrupción que tan solo con un presupuesto de Q7 millones se pretende que persiga el robo de Q15 mil millones.
Creo que tendría muchas empresas queriendo recuperar esa plata más o menos 30 mil millones de quetzales que desaparecen o no llegan a las arcas de Estado al año. Hay que recordar que TODA la recaudación no llega a los Q49 mil millones. Eso quiere decir señor Presidente que su gobierno pierde más de la mitad de TODO lo recaudado o que pudiera recaudar por corrupción!!!! ufff
De repente se me ocurre una cuarta tercerización. ¿Por qué no tercerizamos la Presidencia? Ya que estamos con ganas de ser más eficientes en el quehacer del Gobierno del general Otto Pérez Molina. Al final nadie tiene duda que los malos resultados de la recaudación por parte de la SAT, es tan solo un reflejo del propio gobierno del PP.