Por Sara Barderas /dpa
Washington
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio hoy inicio a una militarización en la frontera con México, donde en las próximas horas llegarán efectivos de la Guardia Nacional con la misión de ayudar a frenar la entrada de inmigración ilegal mientras construye su famoso y polémico muro.
El mandatario, que ha hecho de la seguridad fronteriza y la mano dura con la inmigración uno de los focos de su presidencia, preparó desde el fin de semana el terreno para el anuncio de ayer con una oleada de tuits y declaraciones en los que volvió a arremeter contra México, acusándolo de no frenar los flujos migratorios hacia Estados Unidos y amenazándolo con romper el Nafta si no lo hace.
«El presidente ha mandado que el Departamento de Defensa y el Departamento de Seguridad Nacional trabajen juntos con nuestros gobernadores para desplegar a la Guardia Nacional en nuestra frontera suroeste», anunció su secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
El Gobierno de Trump asegura que existe un aumento en el número de inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera desde México, pese a que las cifras de detenciones allí han caído a mínimos en décadas. Las estadísticas, además, muestran que ya hay más mexicanos que dejan el país que los que llegan.
De momento no hay cifras de los efectivos que se desplegarán ni estimaciones del coste. La Guardia Nacional es un cuerpo de voluntarios que sirve como fuerza de reserva del Ejército. Suele ser utilizado en respuesta a catástrofes. Cada uno de los estados cuenta con la suya propia. Los que hacen frontera con México son Texas, Nuevo México, Arizona y California.
La ley estadounidense prohíbe que los cuerpos militares actúen como agentes de policía en la aplicación de la ley, por lo que los efectivos de la Guardia Nacional que se desplieguen no podrán participar en detenciones y se tendrán que limitar a la colaboración en la seguridad fronteriza.
«Hoy es el día en el que queremos empezar este proceso. La amenaza es real», dijo Nielsen al ser preguntada sobre por qué un despliegue ahora. Una caravana de unos 1 mil centroamericanos que recorría México hacia la frontera estadounidense para denunciar, como cada año, la pobreza y violencia en la que se vive en su región estuvo detrás de los tuits de Trump de los últimos días.
En Washington hay analistas que interpretan el despliegue de la Guardia Nacional como un mensaje de Trump a sus bases de votantes. «La maniobra es simplemente estúpida», expresó Frank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice. «Se trata de la incompetencia, la petulancia y la xenofobia de Trump».