Por Joseline Ayala
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En una sesión exprés, hoy el Congreso rechazó la intención del oficialismo de continuar en el trámite de la tercera lectura y redacción final del proyecto del Presupuesto 2018, eliminando cualquier posibilidad de que la alianza dentro del Legislativo aprobara un proyecto fuertemente criticado.

Con un atraso de más de una hora comenzó la sesión plenaria con 90 diputados presentes en el hemiciclo. Previo a eso, la bancada Todos y el Frente Parlamentario por la Transparencia, en distintas conferencias de prensa, manifestaron su oposición al Presupuesto 2018.

En el momento en el que comenzó la sesión plenaria los parlamentarios rechazaron, en dos ocasiones, la propuesta de aprobar el orden del día con el punto de agenda en la que se entraría a conocer en su redacción final el proyecto.

Habiéndose agotado la agenda y con el oficialismo aceptando su clara derrota el presidente de la Junta Directiva, Óscar Chinchilla, levantó la sesión plenaria y con esto dio por finalizado el segundo período de sesiones ordinarias del Congreso de la República.

Las intenciones de la bancada oficial para aprobar el Presupuesto comenzaron desde principios de año cuando lograron quedarse con la presidencia de la Comisión de Finanzas Públicas y Moneda, sala encargada de dictaminar el proyecto que elabora el Organismo Ejecutivo a través del Ministerio de Finanzas.

Luego de esto, el presidente de esa Sala de Trabajo, Adim Maldonado, logró obtener las firmas necesarias para que el dictamen que elaboró sin tomar en cuenta ningún aporte de los parlamentarios fuera emitido de forma favorable.

En una acción calificada de ilegal, el oficialismo logró el pasado martes levantar una sesión permanente en la que se encontraba el Congreso desde hacía dos semanas para que el proyecto del Presupuesto se conociera en primera lectura.

Ayer, en una sesión plenaria convocada a las 18:00 horas y por trámite, el proyecto logró reunir su segunda lectura.

La intención del oficialismo se vio truncada hoy debido a que no mostraron disposición de negociar un proyecto que había sido calificado de desfinanciado y con pocas normas de transparencia.

SIN POSIBILIDADES

En el momento en el que el pleno rechazó el orden del día, el jefe del oficialismo, Javier Hernández, se retiró del pleno y al ser abordado por la prensa indicó que era claro que el Frente de Convergencia Nacional no tenía las posibilidades ni el apoyo necesario para que el proyecto fuera aprobado.

«No tenemos el apoyo, no tenemos las posibilidades, está claro que el proyecto no va a pasar, es por eso que me retiro del hemiciclo, ahora vamos a ver cómo se ordena el Ejecutivo y sale adelante el país», declaró el diputado.

Desde inicios de esta intención, el oficialismo mostró y aceptó que no tenía el apoyo de 80 parlamentarios que serían necesarios para que el proyecto fuera aprobado.

En su momento, Hernández indicó que se apoyarían en los legisladores independientes que conforman el cuarto número más grande de representación dentro del hemiciclo.

Con este apoyo, en un inicio, se logró darle trámite a la propuesta, pero luego de esto más diputados se fueron oponiendo y pronunciándose en contra del documento.

BANCADAS SE OPUSIERON

Desde el pasado 17 de noviembre, cuando el diputado Maldonado presentó el dictamen del Presupuesto, la bancada de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), indicó que no apoyaría el mismo por haber existido un secretismo alrededor del documento.

El jefe de esa bancada, Orlando Blanco, anunció que los más de 30 diputados que conforman ese bloque no apoyarían el proyecto, algo que luego convirtieron en una amenaza de represalias legales por la forma en la que se tramitó el mismo dentro del hemiciclo.

Blanco dijo hoy que el fracaso del oficialismo en conjunto con su alianza demostró que el proyecto era negativo para el país debido a los detalles que contenía.

Agregó que no sólo no era viable para el país sino que, además, había sido conocido dentro del pleno a través de una serie de ilegalidades, que traería consecuencias en un futuro.

SIN LOGRAR ACUERDOS

Desde un inicio la bancada TODOS se mostró dispuesta a participar dentro de la discusión, pero al momento de analizar el documento presentaron cuatro enmiendas a los artículos 31, 52, 56 y 94 del proyecto, por ser considerados como bolsones de corrupción y cheques en blanco.

El integrante de esa bancada Felipe Alejos, indicó que hasta ayer por la noche no se lograron los acuerdos necesarios por lo que hoy dicha bancada conformada por 16 parlamentarios se retiró del pleno.

EL PROYECTO

El dictamen elaborado por la Comisión de Finanzas del Congreso establecía un techo de 84 mil 596 millones de quetzales de los que se utilizarían 54 mil 840 millones de quetzales en funcionamiento, 16 mil 593 millones de quetzales en inversión y 13 mil 162 millones de quetzales en deuda.

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