POR KIMBERLY LÓPEZ
klopez@lahora.com.gt

El Ministerio con la peor ejecución hasta ahora es el de Desarrollo Social. A dos meses de que termine el año, la cartera solamente ha ejecutado el 24.82% de sus recursos. El Ministerio fue creado durante la gestión del expresidente Otto Pérez Molina y, desde entonces, se ha dedicado a la ejecución de programas sociales, pero también ha sido fuertemente cuestionado por el manejo opaco de los recursos y los pocos resultados. Ahora, la cartera está a cargo de un funcionario sin más experiencia que la de haber crecido en condición de pobreza, según dice.

Ennio Horlando Galicia, ministro de Desarrollo y exasesor presidencial, asumió el cargo titular de la cartera creada para la planificación y ejecución de programas sociales hace un par de meses. Galicia dice no contar con mayor experiencia que la condición de pobreza en la que vivió desde su infancia. En el tiempo que queda de esta gestión, asegura, la población no puede esperar de él “milagros” y que no prometerá acciones que no sean realizables.

¿Cuáles son las capacidades con las que cuenta para estar al frente del Ministerio de Desarrollo?

Tengo una historia de trabajo en el sector privado y en asesorías. Tal vez la mejor experiencia es mi vida propia, me he desarrollado viviendo de una familia pobre y he llegado hasta hoy a ser honrado.

Puede tener uno mucho estudio y estar muy bien preparado, pero realmente no es la base fundamental para poder entender lo que está pasando en nuestro país. Guatemala tiene mucha miseria, mucha pobreza y que ha impactado en políticas conjuntas a largo plazo, y cuando le digo a largo plazo es que no sea llevar una lámina o una costanera sino que sea subir las gradas que necesita la población.

Tenemos la obligación moral y ética que poder ayudar al ciudadano guatemalteco, sacarlo del piso de la extrema pobreza y empezarlo a subir a la pobreza. Pero también es necesaria la voluntad propia de continuar subiendo gradas y el riesgo de volver a caer. Pero eso ya es conjunto, ya es agarrar los programas que tiene la sociedad, el Estado, el sector privado porque yo quiero salir también de mi pobreza.

Siendo guatemalteco, viniendo de donde vengo, comprendo la pobreza y extrema pobreza y hacia donde podríamos llevar a nuestra gente. No es solamente dar un hacha, una piocha, eso no es sacar a la gente de pobreza.

¿Es decir que no comparte la idea de programas sociales asistencialistas?

No se trata de un enfoque asistencialista. Tienen que ser programas y políticas integrales. El Organismo Ejecutivo tiene 14 ministerios. Yo la semana pasada[PM1] (segunda semana de agosto) tuve el honor de ir a entregar tres casitas de extrema pobreza, ya a ellos ya se les subió una grada, son pobres, pero ya no son extremos pobres.

La extrema pobreza es no tener un techo digno, tener nylon, cartones, pedazos de árboles que cubren unas paredes tapadas con algunas mantas o los retazos de mantas vinílicas. Eso es extrema pobreza, están en las laderas de los barrancos, poniendo en riesgo su vida.

Pobreza es cuando ya tengo mi techo de cuatro paredes, tengo un baño que me permite no tener aguas negras, tener agua y tener un trabajo. Ahí ya depende de mí subirme al tren que me va llevar a otro lado, en donde ya puedo seguir estudiando, ya puedo solicitar una beca, pero eso es a través de políticas y programas de mediano y largo plazo.

Sin embargo, no es de esa forma como ha funcionado el Ministerio de Desarrollo.

Estoy iniciando un proyecto que le quiero presentar al Presidente para hacer un convenio con autoridades locales de cada lugar, departamentos, en donde podemos sacar por lo menos a 500 familias (pongamos un piso). Mi objetivo es sacar mil familias en un año, por cada departamento sacar de la extrema pobreza, en un año, estamos hablando de 22 mil familias que estamos sacando de la extrema pobreza y subiéndole las gradas hacia la pobreza. Ese es el proyecto que estoy trabajando, es lo que voy a presentar al Presidente y Vicepresidente.

Porque también necesito de otras instituciones, por ejemplo, las municipalidades y del beneficiario. Si viven en malas condiciones y mejoran su vivienda creo que anímicamente se van a sentir mejor para apuntarse en una lista de instituciones como Intecap, o instituciones que dan becas, como la Escuela Nacional de Enfermería.

Por eso le digo, depende cuánto quiera yo invertir del tiempo que tengo durante el día para poder brincar la otra brecha. Eso también depende mí.

Entiendo que en estos días ha evaluado el Ministerio. ¿Cómo ha visto el desempeño de la cartera y de los antecesores?

De aquí para atrás podemos aprender. No eran programas que iban enfocados directamente a pegarle a ese índice de pobreza extrema, por eso es que se necesita un cambio. Por ejemplo, el Fondo de Desarrollo (Fodes). El Fodes entrega más de 100 mil láminas, ¿dónde están esas láminas?; miles de quintales de cemento, ¿dónde están esos quintales?

Pero es porque no hemos logrado tener un programa que impacte. Yo he visto la historia de vida de Guatemala, si yo saco a la familia Pérez del nylon donde viven y les pongo cuatro paredes, yo ya los saqué.

No se percibe lo que el Ministerio ha hecho, pero sí ha hecho. Entonces tenemos que ser más organizados, sin ningún tipo de orientaciones políticas.

¿Podría decir que muchos de los recursos del Mides aparentemente fueron ejecutados, pero en el campo no están?

No. Tuve la oportunidad de conocer Jacaltenango en diciembre, es un municipio lejano. Ahí ha habido mucha inversión de parte de este Ministerio y del Ministerio de Agricultura. Le puedo contar que he ido tres veces y les hemos llevado mucho apoyo. También en Ixchiguán y Tajumulco.

El problema es que si le doy a doña Juana láminas porque no tenía, sí está documentado, pero no impactó. Entonces, el programa estará enfocado en darles insumos a 50 familias y a esas 50 familias sacarlos de la pobreza.

Usted habla de un plan para mejorar la condición de vivienda de algunas familias, pero ¿cómo garantizar que después de eso la situación de esas personas mejore?

Porque ahí es donde entran los demás programas sociales. Luego para que las familias se suban al vehículo del desarrollo, estarán el resto de programas sociales.

Una vez ya tengamos nombres y apellidos les llevamos programas de becas, y ya pasan de sexto primaria a tercero básico y ya tienen un mejor trabajo.

Cuando el exministro José Moreno presentó su renuncia, se conocieron documentos enviados por diputados solicitando plazas dentro del Ministerio.

Yo no creo que venga un diputado… ya recibí la visita de un diputado, de Mike Mérida, una visita de cortesía con una actitud increíble. Los diputados tienen que fiscalizar que el desarrollo llegue a los lugares. Están en su pleno derecho de velar por el derecho, entonces yo no creo que un diputado tenga la intención de pedir algo de esa forma. Este despacho está abierto pero que yo me preste a algo, jamás.

En términos generales, ¿qué es lo que se puede esperar del tiempo que resta para esta gestión?

Guatemala puede esperar de este despacho: trabajo, esfuerzo, dedicación, responsabilidad integridad, valores. No pueden esperar milagros, no soy santo para hacer milagros, pero que no duden que desde ya estoy trabajando para ellos. Tampoco hago promesas que no puedo cumplir, soy muy aterrizado.

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