Por Andrea Sosa Cabrios
Ciudad de México
AGENCIA/dpa
De los más de 100 objetivos que Estados Unidos se planteó para la renegociación del Nafta, el tratado de libre comercio de Norteamérica, hay por lo menos cinco que pueden sacar chispas en las discusiones con México y Canadá.
DÉFICIT
La gran meta de Donald Trump es reducir el déficit comercial. Su obsesión son los 64 mil millones de dólares de desbalance con sus vecinos mexicanos.
«México se ha aprovechado de Estados Unidos», aseveró Trump. México responde que el déficit no es malo por sí mismo. Entre otras cosas señala que México es el principal proveedor de muchas industrias estadounidenses que gracias a ello son competitivas en el mundo.
«Encantado de analizar lo que le llamamos el rebalanceo comercial, siempre y cuando logremos mejorarlo a través de expansión del comercio y no a través de restricción», dijo el ministro de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo.
CÁPITULO 19
«Eliminar el capítulo 19 de resolución de controversias», dice de manera escueta el documento de prioridades de Estados Unidos. Este punto anticipa una batalla.
Lo que Washington pretende es borrar del mapa un mecanismo trilateral que interviene cuando hay diferendos. Trump busca hacer valer directamente las decisiones de instancias estadounidenses. Para Canadá esa podría ser una línea roja infranqueable. México también se opone. El mecanismo garantiza una mayor imparcialidad.
«Un sistema justo de resolución de controversias es esencial para cualquier acuerdo comercial que Canadá firme, y esperamos que eso siga siendo el caso en un Nafta renegociado», dijo el Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau.
COMERCIO ELECTRÓNICO
Este tema se va a introducir en las discusiones. El sector no era relevante cuando se negoció el Nafta original.
Estados Unidos quiere que suba el límite de importación libre de impuestos de productos comprados en tiendas online.
Canadá aplica un impuesto a las compras superiores a los 20 dólares y México a las mayores de 50 dólares. En Estados Unidos el monto libre de impuestos son 800 dólares.
BARRERAS A LA AGRICULTURA
Estados Unidos pretende que se eliminen las «barreras a la agricultura». En la mira está en gran medida Canadá.
Los productores estadounidenses de leche y otros del sector agrícola acusan a ese país de usar distintas regulaciones para proteger su mercado.
El objetivo de Estados Unidos es que se deseche todo tipo de medidas no arancelarias que afecten las exportaciones estadounidenses, «entre ellas las barreras discriminatorias, la administración restrictiva de cuotas arancelarias y otras medidas injustificadas que limitan injustamente el acceso al mercado de productos estadounidenses».
REGLAS DE ORIGEN
Otro de los objetivos de Estados Unidos es fortalecer las reglas de origen. Es decir, limitar los componentes chinos o de otros países en los productos norteamericanos.
México advierte que es un tema que se debe discutir con cuidado, aunque reconoce que en algunas fracciones arancelarias se han ido relajando las reglas. Buena parte de los componentes de las pantallas planas que se fabrican en México y se exportan a Estados Unidos, por ejemplo, son chinos.
«¿Esto podría ser revisado? Sí», dijo el ministro de Exteriores, Luis Videgaray, pero señaló que se debe mantener competitiva a la industria de Norteamérica. «A nadie le convendría hacer reglas de origen más exigentes, si eso va a resultar en que los productos norteamericanos (…) sean más caros y vayamos a perder mercado y vayamos a lastimar a nuestros propios consumidores».