POR JOSÉ DEL ÁGUILA
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Supuestos quebrantos de salud de la exvicepresidenta Roxana Baldetti y la falta de un abogado defensor fueron los motivos por los cuales el juez de Mayor Riesgo “B”, Miguel Ángel Gálvez, se vio obligado a suspender, nuevamente, la etapa intermedia del Caso “La Línea”. Los intentos fallidos de iniciar la audiencia suman ya una decena.
Previo a dar inicio a la audiencia, el juez Gálvez informó que, además, algunos abogados habían renunciado a la defensa técnica de sus clientes el pasado viernes, por lo que este hecho podía entorpecer también el inicio de la etapa intermedia.
El Juez ingresó a la Sala de Audiencias alrededor de las 10:00 horas, y al pasar asistencia se percató de que algunos sindicados, entre quienes se encontraba Baldetti, aún no habían sido trasladados por el Sistema Penitenciario a la Torre de Tribunales.
Durante el desarrollo de la diligencia, el abogado defensor de Baldetti, Fernando Guerra, pidió la palabra e indicó que su clienta había sido trasladada de vuelta a la cárcel Santa Teresa entre el sábado y domingo, por lo que el tratamiento médico que se le practicaba no finalizó.
Por tal motivo, Guerra solicitó que se ordenara que Baldetti reingresara de nuevo al sanatorio privado, con el fin de que se pudiera finalizar el tratamiento médico y se le retirara un catéter.
Según los dictámenes del Inacif, Baldetti tiene una bacteria en el organismo, pero no se especifica cuál es el padecimiento.
Luego de escuchar al abogado defensor, Gálvez dijo que lo prudente era suspender la diligencia y agregó que giraría un oficio para que Baldetti ingresara nuevamente al sanatorio, en virtud de que esa fue la recomendación del Instituto Nacional de Ciencias Forenses.
Asimismo, Gálvez dijo que la razón por la cual ordenó el traslado de Baldetti, del sanatorio a la prisión, fue porque los médicos que la trataban estaban evaluando la posibilidad de darle egreso este sábado que pasó, lo cual no era permitido.
“Ellos -los médicos tratantes- dicen que le van a dar egreso el día 15 del presente mes y darle egreso no puede. En todo caso le tendrían que informar al juez, porque no le van a dar egreso y máxime día sábado. Eso fue lo que me generó duda”, dijo Gálvez.
Además de Baldetti, otro de los motivos por los cuales se suspendió la audiencia fue porque el sindicado Julio Rogelio Robles no contaba con un abogado defensor. Robles dijo que desde la semana pasada solicitó al Instituto de la Defensa Pública Penal acompañamiento legal, pero ningún abogado se presentó a la Sala de Audiencias.
El primer intento de inaugurar la etapa intermedia fue en marzo de 2016. El caso se ha retrasado por los múltiples recursos interpuestos por las partes, la sobrecarga laboral del juzgado, la incomparecencia de sujetos involucrados en el proceso e incluso por incidentes de seguridad en la torre de tribunales.
