Dr. Luis Fernando Cordón Morales
@lfercordon – buzonasprodecogt@gmail.com

Recientemente la escuela internacional de negocios ADEN Business School ubicó a Guatemala en décimo quinta posición de dieciocho países de Latinoamérica, en su medición de competitividad, resaltando como los principales problemas el de inseguridad, institucionalidad e infraestructura. La importancia de este tipo de ejercicios es que nos desnuda sobre el clima de negocios que realmente podemos ofrecer y la ruta a seguir para buscar mejorarlos.

Respecto al problema de inseguridad, según el índice Internacional de Seguridad y Policía, Guatemala se ubica en el puesto 107 de 127 países sondeados, y es que en la actualidad pese a los esfuerzos y el apoyo técnico la violencia sigue vigente y así es percibida por la población que se siente altamente vulnerable; por lo que una política aislada y concretada únicamente a la reacción y publicidad está resultando insuficiente. La crisis de seguridad impacta directamente a la ciudadanía que es la extorsionada, hostigada, asaltada, violada y asesinada; por lo que no podemos hablar de desarrollo humando con una población sometida diariamente por el crimen.

En cuanto a la institucionalidad, el reporte del Foro Económico Mundial de Competitividad Global 2016-2017 ubica a Guatemala en el puesto 110 de 138 países, siendo el más bajo de todos sus componentes evaluados y obliga a poner las barbas en remojo. Es frecuente escuchar que estamos en un “Estado fallido” en donde se afirma que las instituciones no funcionan, lo cual es alarmante porque en ellas descansa la visión de Estado de Derecho y de Democracia; por lo que debe servir de atento recordatorio para todos los funcionarios y empleados públicos que están al servicio del Estado, obligados a fortalecerlo y no a debilitarlo culposa ni dolosamente, siendo responsables personalmente por sus actos u omisiones. Sumado al de inseguridad ya referido, continúa la crisis generalizada de la institucionalidad de Guatemala en salud, en el registro e identificación de las personas, migración, justicia, recaudación, persecución, entre otros, y es por falta de políticas de Estado concretas.

El tercer problema en que resalta actualmente Guatemala precisamente resulta ser el de infraestructura, el reporte citado la posiciona en el lugar 78 siempre sobre 138 países, y es que actualmente la red vial está colapsada, incluida la productiva, con lo que está limitada la mejora en competitividad y activa la necesidad de conocer, analizar y ejecutar los planes nacionales de infraestructura, logística y aduanas que ya existen. El Plan Operativo Anual 2017 del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda en la identificación de sus principales metas, justamente en el área de acción infraestructura, estableció como eje central la vial, que incluye la construcción, ampliación, reconstrucción y reposición de carreteras y puentes, entre otros productos importantes, con su respectivo presupuesto de inversión y de funcionamiento.

Las cartas están echadas si realmente deseamos mejorar el clima de negocios y solo queda que los actores del Ejecutivo, Legislativo y Judicial dejen de boicotearse entre sí y asuman su responsabilidad constitucional de promoción del bien común, consolidando el régimen de legalidad, seguridad, justicia, igualdad, libertad y paz.

Artículo anteriorFilgua
Artículo siguienteLa misma mica y la misma montera