Por Gabriel Tuñez
Buenos Aires
AGENCIA/dpa
Malos resultados, disputas con la dirigencia o discusiones con los futbolistas resultan los principales motivos para explicar que 29 entrenadores fueron despedidos o renunciaron en las 30 fechas disputadas en el torneo argentino, que finalizó ayer.
Solo ocho (26 por ciento) de los 30 equipos que participaron del certamen mantuvieron a sus entrenadores durante toda la competencia: el campeón, Boca Juniors (Guillermo Barros Schelotto), River Plate (Marcelo Gallardo), Atlético de Rafaela (Juan Manuel Llop), Banfield (Julio Falcioni), Lanús (Jorge Almirón), Patronato (Rubén Forestello), San Lorenzo (Diego Aguirre) y Talleres de Córdoba (Frank Kudelka).
Unión de Santa Fe, por ejemplo, despidió a tres entrenadores durante la temporada. El último de ellos, Pablo Marini, dejó el cargo en la penúltima jornada.
Por su parte, Huracán, Sarmiento de Junín, Atlético Tucumán, Belgrano de Córdoba, Arsenal, Tigre y Aldosivi destituyeron o sufrieron las renuncias de dos entrenadores cada uno.
Ocho entrenadores, en tanto, pasaron por dos equipos en la misma temporada y uno de ellos, Leonardo Madelón, es el único caso de los que fue despedido en dos oportunidades: Unión y Belgrano.
El entrenador, aseguran el fútbol argentino como un refrán, es el primer interruptor que explota cuando surge un cortocircuito. Es más fácil para los clubes destituir a una sola persona, aunque se encuentra acompañada por un cuerpo de colaboradores, que a más de 20 futbolistas.
Durante 22 años, los torneos argentinos estuvieron estructurados en dos campeonatos «cortos» (19 fechas) por temporada. En ese contexto, los clubes explicaban la rápida destitución de un entrenador sobre la base de que una seguidilla de malos resultados dejaba a un equipo fuera de competencia muy rápidamente.
En 2012, se reinstauraron los certámenes de 30 fechas de extensión. Se especuló con que eso garantizaría que un entrenador pudiera desarrollar su proyecto deportivo con mayor paciencia por parte de los aficionados y las directivas.
Pero nada de eso. El número de despidos no mermó y ronda entre el 70 y el 80 por ciento en las últimas tres temporadas. Abarca tanto a equipos considerados «grandes» como a los de presupuesto más exiguo.
De cara a la próxima temporada, tres entrenadores ya anunciaron que no continuarán en los equipos que dirigían hasta días atrás. Uno de ellos es Sebastián Beccacecce, que se despidió de Defensa y Justicia para acompañar como ayudante al seleccionador argentino, Jorge Sampaoli, tal como hizo años atrás en Chile.