Moscú
DPA
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró hoy durante un programa de televisión en el que anualmente responde preguntas del público que su Gobierno no considera a Estados Unidos un enemigo.
«No vemos a Estados Unidos como un enemigo», aseguró Putin en respuesta a un estadounidense que preguntaba vía videoconferencia sobre cómo gestionar la rusofobia entre sus compatriotas.
Putin señaló que no podía ofrecer un consejo en concreto y aprovechó la ocasión para señalar que los recientes problemas entre los países son resultado de las peleas internas dentro de la cúpula estadounidense. «Sabemos que tenemos muchos amigos en Estados Unidos», insistió Putin.
El programa, que se realiza cada año, cobra especial relevancia en esta ocasión debido a que las elecciones presidenciales se celebrarán el año que viene.
Ante la audiencia, el mandatario aseguró que suspenderá las sanciones contra Occidente cuando se hayan levantado las impuestas a Rusia.
La Unión Europea y Estados Unidos impusieron sanciones a Rusia por la actuación de Moscú en el conflicto ucraniano y Moscú respondió con prohibiciones a la importación de productos lácteos, frutas y verduras de la Unión Europea.
Las sanciones han tenido un efecto positivo, dijo Putin. «Hemos tenido que calentarnos la cabeza, activar el talento y centrarnos en recursos en áreas clave», agregó.
Según sostuvo, el bajo precio del gas y el petróleo tuvo más efecto en la economía rusa que las sanciones, en vigor desde 2014.
Los bajos precios de importantes productos industriales del metal y químicos han debilitado más la economía rusa que las sanciones. «¿Han influido las sanciones? sí, pero ¿son dramáticas? no creo», señaló el mandatario que aseguró asimismo que la recesión «ya es historia».
