Por CARLOS VALDEZ,
LA PAZ,
Agencia AP
«No había pensado (en la reelección), ahora estoy pensando en planificar los cinco años de gobierno», dijo a una consulta en rueda de prensa sobre si pensaba seguir los pasos del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez de continuar en el poder mediante reelecciones.
«Los opositores han dicho que no permitirán la reelección de Evo, (pero) el pueblo opinará y decidirá… El pueblo sabe reconocer los resultados (de la gestión). Estoy nueve años en el gobierno y sigo ganando con el 60%», acotó.
Los cómputos emitidos por cadenas de televisión y diarios de conteos rápidos indicaron el domingo en la noche que Morales ganó con el 60% y obtuvo el primer lugar en ocho de las nueve regiones, incluyendo Santa Cruz, el mayor bastión opositor.
El Tribunal Supremo Electoral no ha entregó resultados oficiales inmediatos.
Según los cómputos extraoficiales, al partido de gobierno le faltaría entre dos o tres escaños para obtener el control de dos tercios de la Asamblea Legislativa, que le permitiría eventualmente reformar la Constitución que Morales mismo impulsó para incluir la reelección indefinida como ha denunciado la oposición durante la campaña.
No obstante una reforma deberá ser aprobada en última instancia en referéndum.
Morales, que dio por descontado que alcanzará a los dos tercios cuando concluya el cómputo oficial, invitó el lunes a la oposición a sumarse a su proyecto pero con propuestas. «Bolivia no quiere confrontación sino un trabajo conjunto, eso dicen los resultados electorales».
Las elecciones del domingo han dejado las cosas tal como están en el escenario político. Con un gobierno fuerte y una oposición que aunque ha recuperado escaños todavía es débil para confrontar a Morales.
Las claves de su éxito electoral han sido su gestión económica que Morales sintetizó en una frase: «Vamos bien». Sus obras de impacto como la compra de un satélite, teleféricos, carreteras pero también su habilidad para hacer pactos con sindicatos y organizaciones que movilizan el voto. Además convirtió en aliados a empresarios agroindustriales del oriente que eran sus adversarios, según han coincidido los analistas.
«Vendió la idea a los empresarios de que pueden ganar dinero si tienen una buena relación con el Estado», dijo a la AP el analista Gustavo Pedraza.
La oposición lo ha cuestionado en la campaña por despilfarro y corrupción y por desaprovechar el buen momento económico para cambiar la salud y la educación que están entre las más deficientes de la región.
Cuando asuma su tercer mandato el 22 de enero próximo, cumplirá 10 años en el gobierno a sus 56 años y se convertirá en el presidente que más tiempo gobernó en forma continua desde la creación de Bolivia en 1825.
Su gobierno impulsa un plan para sacar al país de la pobreza hasta el 2025 cuando Bolivia celebre su bicentenario.
Su triunfo electoral ha sido también atribuido al pobre desempeño de la oposición que no pudo plantear una candidatura única ni un proyecto alternativo, según analistas. Cuatro fueron los candidatos de la oposición.
El más votado fue el empresario del cemento Samuel Doria Medina de la alianza de centro-derecha Unidad Demócrata, con 25% de votos.
«El modelo político que tiene Bolivia hoy le debe mucho al papel que desempeñó la oposición que no se perfila como una alternativa ni es creíble», dijo Eduardo Gamarra, profesor de política internacional de la Florida International University.
Sin embargo, los opositores pueden tener otra posibilidad electoral en febrero de 2015 en los comicios de gobernadores y alcaldes.
Sin formación académica, Morales saltó a la política comandando a los cocaleros en su resistencia a los planes de Estados Unidos para erradicar coca. Las relaciones con ese país están en punto muerto desde la expulsión del embajador de ese país por supuesta injerencia.
En su gestión incrementó el narcotráfico cuyo dinero alimenta la economía, según varios informes.
El domingo dijo que su éxito en la política ha sido «pensar en grande» y por eso se ha propuesto instalar una planta de energía nuclear para exportar electricidad.
