Berlín
DPA
Ivanka Trump, la hija y asesora del presidente estadounidense Donald Trump, se estrenó hoy en el exterior como «primera hija» con una encendida defensa a favor de su padre en una conferencia internacional sobre el empoderamiento de mujeres celebrada en Berlín.
Trump viajó a la capital germana invitada por la canciller alemana, Angela Merkel, con quien se vio por segunda vez tras la visita de Merkel a Washington en marzo.
La llamada cumbre «Women20 Summit» reúne durante dos días en Berlín a un centenar de delegadas de los veinte países industrializados y emergentes del mundo, el llamado Grupo de los Veinte (G20), cuya presidencia rotativa ostenta este año Alemania.
A poco de comenzar el encuentro, Trump fue preguntada sobre la postura de su padre hacia las mujeres en alusión indirecta a algunas declaraciones de menosprecio hacia el sexo femenino vertidas por Trump en el pasado.
«He escuchado las críticas de los medios. Pero por experiencia personal sé de miles de mujeres que han trabajado con y para él durante décadas y que son testigos de su firme confianza en el potencial de las mujeres y en su habilidad de trabajar igual de bien que los hombres», sostuvo.
La segunda hija de Trump precisó que ella misma había crecido sin obstáculos. «Pude lograr todo lo que quería lograr. Pude tomar el camino que quería tomar y mi padre lo hizo todo posible. No hubo diferencias entre mis hermanos y yo».
Ivanka Trump, a quien la Casa Blanca denomina oficialmente como «First Daughter» («Primera Hija»), relativizó su papel como asesora presidencial. «Apenas estoy empezando. Este papel es nuevo para mí (…) Estoy escuchando, aprendiendo, buscando el consejo de mujeres y también de hombres», comentó.