Eduardo Villatoro

Siempre de acuerdo con esa versión, tres cuartas partes de los alumnos inscritos en la citada escuela privada, que presumo es muy exclusiva, son vástagos de personas que trabajan en el área de las nuevas tecnologías en Silicon Valley, que, al parecer, prefieren un establecimiento escolar que no utiliza computadoras, pese a que están estrechamente ligadas laboralmente a la industria informática.

El periódico francés recoge el testimonio de uno de estos padres, Pierre Laurent, quien escogió esa escuela porque cuestiona la tendencia actual a equipar a la informática a las clases a una edad cada vez más temprana. ”La computadora no es más que una herramienta -precisa-, y el que sólo tiene un martillo piensa que todos los problemas son clavos”.

Con convicción y persuasión argumenta: “Para aprender a escribir es importante poder efectuar grandes gestos. Las matemáticas pasan por la visualización del espacio. La pantalla perturba el aprendizaje, y disminuye las experiencias físicas y emocionales” En la escuela Waldorf esa limitación no existe, en vista de que se aprende a sumar y a restar dibujando o saltando a la cuerda.

Al ser consultado sobre si sus hijos están en desventaja por este retraso en el uso de la PC, Laurent responde: “No sabemos cómo será el mundo dentro de 15 años porque las herramientas habrán tenido tiempo de cambiar muchas veces. Por haber trabajado 12 años en Microsoft, sé hasta qué punto los softwares son preparados para ser del más fácil acceso posible”. Trae a cuenta que los alumnos del citado colegio (como casi todas las escuelas en USA) tienen computadoras en sus casas, de suerte que la cuestión se reduce a decidir cuándo levantar las limitaciones a su uso.

El mismo Richard Stallman, gurú del software libre, trabaja desconectado, afirmando: “La mayor parte del tiempo no tengo Internet. Una o dos veces por día, a veces tres, me conecto para enviar y recibir correos. Releo todo antes de reenviar”.

(Después de apagar su PC, el profesor Romualdo Tishudo cita a Albert Einstein: -Temo el día en que la tecnología sobrepase a nuestra humanidad. El mundo sólo tendrá una generación de idiotas)

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