GLASGOW, Escocia
AP
Dirigentes de la Agencia Mundial Antidopaje denunciaron ayer a Rusia por no reconocer que operó un programa de dopaje patrocinado por el Estado, que ha obstruido continuamente la realización de las pruebas y que organizó una serie de ciberataques contra la propia agencia.
Los funcionarios de la AMA advirtieron que el deporte ruso tendrá dificultades para recuperar la confianza del mundo deportivo si sus líderes continúan negándose a aceptar las conclusiones clave de las investigaciones que revelan una corrupción arraigada profundamente.
La crítica pública se produjo mientras se reveló que el informe final sobre el dopaje estatal ruso, del investigador Richard McLaren, será publicado el 9 de diciembre.
Vitaly Smirnov, el exministro de Deportes soviético que encabeza ahora la comisión antidopaje respaldada por el Estado ruso, respondió desafiante: «Rusia nunca ha tenido un sistema de dopaje patrocinado por el Estado».
La postura inquebrantable del gobierno ruso provocó una fuerte respuesta del subdirector general de la AMA, Rob Koehler.
«Debe haber una aceptación de las conclusiones del informe McLaren… porque son fácticas», dijo Koehler.
«¿Podrían avanzar?», añadió. «Hemos dicho desde el principio que una de las cosas más importantes que debe suceder es el cambio cultural. Parte del cambio cultural es admitir algunos de los hechos».
A Vitaly Mutko —recién ascendido desde ministro de Deportes a viceprimer ministro— se le prohibió asistir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en agosto luego de que McLaren lo acusó de ordenar el encubrimiento de una prueba antidoping fallida por un jugador de fútbol extranjero.
En una presentación previa, Koehler criticó a Mutko por tachar el informe de McLaren de estar «falsificado» y por amenazar con enjuiciar a quienes ayudaron a los investigadores. Koehler también denunció ataques cibernéticos contra la AMA que «según se nos dijo, fueron dirigidos por grupos de espionaje rusos».