Por MARTIN CRUTSINGER,
WASHINGTON
Agencia AP
El Departamento del Comercio dijo que la cifra, correspondiente de los meses entre abril y junio, contrasta agudamente con la contracción de 2,1% reportada en los primeros tres meses del año, cuando un invierno inusualmente fuerte provocó la más pronunciada baja de la actividad económica desde la Gran recesión.
La cifra divulgada hoy incluso superó al estimado de 4,2% que se hizo hace un mes. La corrección es reflejo de una mayor inversión empresarial y más exportaciones. Los economistas calculan que la economía está creciendo por encima del 3% en el trimestre actual de julio-septiembre.
El crecimiento de 4,6% conforma el estimado final y definitivo del gobierno para el segundo trimestre. El primer estimado fue de 4%, y el segundo, revelado el mes pasado, fue de 4,2%.
La cifra definitiva refleja la fortaleza de la inversión empresarial, que creció a una tasa anual de 9,7% en el segundo trimestre. Ello incluso supera las expectativas del gobierno, que se situaban en 8,1%, gracias a las inversiones en infraestructura y en equipos.
La modificación mostró que las exportaciones crecieron a una tasa de 11,1% en el segundo trimestre, comparado con el estimado original de 10,1%.
El gasto de los consumidores, que comprende más de dos terceras partes de la actividad económica, creció en una tasa anual de 2,5%, igual que el estimado previo pero el doble del 1,2% registrado en el primer trimestre.
El aumento de la actividad económica en el segundo trimestre se debe en parte a la rápida recuperación después de un invierno inclemente que afectó la producción fabril e impidió que los consumidores acudan a las tiendas a comprar.
Los economistas anticipan que habrá menos volatilidad del crecimiento ahora y que la economía crecerá en 3% o más tanto en el trimestre actual de julio-septiembre como en el cuarto trimestre del año.
Sin embargo, debido a los tropiezos de comienzo de año, el crecimiento para todo 2014 probablemente no superará el 2,1%, casi igual al del año pasado, de 2,2%.
Los analistas albergan muchas más esperanzas para 2015. Opinan que la economía finalmente se adentra en un período de robusto crecimiento a medida que el desempleo desciende. Con más empleo habrá mayor consumo, lo que comprende dos terceras partes del crecimiento económico.