POR MARIELA CASTAÑÓN
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El ministro de Gobernación, Francisco Rivas, dijo que aún no puede confirmar o descartar que el chaleco blindado con el logotipo de la empresa de seguridad G4S Secure Solutions S.A., usado por uno de los presuntos atacantes de un reo y tres personas a inmediaciones de la Unidad de Atención al Enfermo Renal Crónico (Unaerc) la semana pasada, sea propiedad de esa empresa o esté falsificado, pues las pesquisas continúan por este, y otros hallazgos encontrados.

A ocho días del atentado ocurrido a inmediaciones de Unaerc, donde murieron cinco personas, fue consultado el titular de la Cartera del Interior, quien explicó que los indicios encontrados son analizados por el Ministerio Público (MP) y el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).

Al funcionario se le consultó si establecieron que el chaleco blindado con el logotipo de la empresa G4S que usaba José Rigoberto Vásquez, uno de los presuntos atacantes que murió en el Hospital General San Juan de Dios dos días después del atentado, pertenecía a la empresa de seguridad o si se trataba de una falsificación del logotipo, a lo cual respondió que aún no lo puede descartar o confirmar, pues son el MP e Inacif las entidades que analizan esa información e indicios.

“El análisis para determinar la veracidad está en proceso por las diligencias de investigación que el MP está requiriendo a esa empresa, y también por los peritajes y análisis que el Inacif haga a esa indumentaria que se localizó”, explicó el Ministro.

HECHOS

El viernes pasado hombres armados dispararon frente a Unaerc y mataron al recluso Gerber Alejandro Calderón Meza, quien esperaba ser atendido en esa institución.

Los sicarios dispararon indiscriminadamente y mataron al guardia del Sistema Penitenciario (SP), Romeo Lem Cal; al enfermo renal Antonio Samayoa Acosta y al lavador de vehículos Edwin Rolando Prieto López.

Mientras que el domingo falleció uno de los supuestos atacantes identificado como José Rigoberto Vásquez, de nacionalidad salvadoreña, y quien tenía dos órdenes de captura: una por asesinato y otra por homicidio agravado.

Por otro lado, de acuerdo con el testimonio de reos, guardias y otras personas que presenciaron el atentado, el objetivo era Calderón Meza, quien era integrante del Barrio 18 y tenía aproximadamente un mes de ser trasladado del Sector 11 del Centro de Detención Preventiva para Hombres de la zona 18 a Pavón. Ese día fue llevado a Unaerc porque necesitaba una diálisis ya que estaba “enfermo de los riñones”, explicó su esposa, Jessica López.

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