París
DPA

Más de 90 mil personas a los pies de la Torre Eiffel. Bocinazos y fiesta hasta el amanecer. Sonrisas y alegría en los Campos Elíseos. La selección francesa de futbol despertó una ilusión que hacía tiempo que no se vivía en el país anfitrión de la Eurocopa, una nación golpeada por el terrorismo en los últimos meses.

Los atentados terroristas del 13 de noviembre cerraron un 2015 marcado por la sangre en Francia. Y la Eurocopa aparecía más como un reto organizativo y de seguridad que futbolístico. La victoria del jueves por 2-0 sobre Alemania en Marsella, que dejó a la selección de Didier Deschamps a 90 minutos del título, devolvió la sonrisa a Francia.

«Esto nos debería devolver un poco la moral y la confianza en lo que es Francia», señaló el secretario de estado Jean-Marie Le Guen a iTélé después de una noche larga en París, en la que no dejaron de ondear banderas francesas por todas las calles.

Se celebró el pase a la final, se cantó la Marsellesa y se encumbró a Antoine Griezmann, nuevo héroe nacional tras sus dos goles ante Alemania. «Griezmann presidente», cantaron miles de aficionados en los Campos Elíseos, donde continuó la fiesta que arrancó en la «fan zone» de los Campos de Marte frente a la Torre Eiffel.

Hacía mucho tiempo que no se veían semejantes escenas de júbilo. «Orgullosos de ser azules», tuiteó el palacio del Elíseo en la noche de ayer , después de que el presidente François Hollande abandonara el Stade Vélodrome -fue a ver todos los partidos en directo- con su bufanda de Francia y entre una nube de «selfies» con aficionados.

Según algunos analistas, Hollande tendría bastantes motivos para festejar el triunfo. Un título de Francia haría más fácil su reelección en 2017, apuntan los expertos.

Hollande lo niega por el momento, pero ganar una Eurocopa en casa después de todo lo ocurrido en los últimos meses supondría un respiro para la sociedad gala y para el presidente, señalado por una reforma laboral que derivó en numerosas huelgas antes y durante el torneo.

La Eurocopa era el momento para recuperar algo de paz, para devolver algo de alegría a una nación desgarrada por los atentados terroristas del 13-N.

El rostro de niño bueno de Griezmann apareció hoy impreso en la mayoría de las portadas de los diarios.

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