Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

El incumplimiento en los esquemas de vacunación podría generar graves consecuencias como nuevos brotes de enfermedades ya erradicadas que serían mortales ante un debilitado sistema de salud que no podría afrontar epidemias, de acuerdo a la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH). El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), señala que sí han existido avances pese a que el último informe señala que no se logró llegar a la meta establecida en el primer trimestre del año.

La Encuesta Nacional de Salud Materno Infantil, elaborada por MSPAS, el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan), se realizó en niñas y niños de 12 a 23 meses, edades en que la mayoría de menores debe contar con las inmunizaciones requeridas.

El porcentaje señalado en la encuesta, con esquemas completos de vacunación para los menores según la edad, es del 59 por ciento. De acuerdo con el estudio, casi la totalidad de los niños y niñas recibieron la vacuna BCG, las primeras dosis de pentavalente y polio, con un 98 por ciento en cada caso.

Las dosis múltiples disminuyeron de 85 a 83 por ciento, y en terceras dosis, solo el 63 por ciento de niños y niñas de 12 a 23 meses recibió la vacuna antisarampión.

No obstante, las mayores diferencias en la cobertura de vacunación completa se presentan por departamento, lo que significa un alto riesgo a enfermedades que se puedan registrar en estas áreas.

“Las menores coberturas se encuentran en los departamentos de San Marcos (38 por ciento), Suchitepéquez (42 por ciento) y Huehuetenango (44 por ciento); lo que representa una alta vulnerabilidad a las enfermedades infantiles en estos departamentos”, aseguró el estudio.

TERCER LUGAR EN MORTALIDAD INFANTIL

La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) señaló en su informe circunstanciado de 2015, que Guatemala ocupa el tercer lugar de mortalidad infantil en Centroamérica, superado por países como Honduras y Nicaragua.

De acuerdo a la PDH, las muertes son en niños y niñas menores de 5 años por enfermedades diarreicas agudas, seguidas de infecciones respiratorias agudas. Asimismo, cita que en 2014 el MSPAS reportó coberturas de inmunizaciones que no superaron el 91.09 en ninguna vacuna; la dosis más baja fue la del neumococo con un 59.87 por ciento.

En síntesis la magistratura de conciencia destacó que la Encuesta Nacional de Salud Materno Infantil (ENSMI) reflejó la falta de cumplimiento de las acciones del Plan Pacto Hambre Cero.

“En comparación con la cobertura vacunal mundial que reporta la Organización Mundial de la Salud (OMS), Guatemala se encuentra por debajo del promedio en cuatro de ellas. Tres de estas vacunas son contra enfermedades que se consideraban ya erradicadas (tétanos, poliomielitis y sarampión)”, destaca el informe circunstanciado.

Según la PDH, es la baja cobertura la que representa un riesgo para la aparición de brotes, y significa un retroceso en la salud, así como un indicador de la falta de garantías al derecho a la salud en la niñez guatemalteca.

El año pasado el MSPAS reportó en octubre de 2015, que de 380 mil niños que debían ser inmunizados, en ese período contra el sarampión, paperas y rubeola solo se había vacunado al 64%, por lo que se llevó a cabo una jornada de vacunación nacional, de la que se efectuaron 219 mil 685 aplicaciones en neumococo, 751 mil 387 pentavalentes, un millón 349 mil 403 OVP, y un millón 80 mil 859 contra tétanos y difteria.

La Hora intentó obtener las cifras de abastecimiento de vacunas del MSPAS, y el vocero de la institución únicamente se limitó a indicar que existían problemas en los correos electrónicos del ministerio, pero no trasladó la información requerida.

NIVELES DE VACUNACIÓN SIMILARES CON RELACIÓN A 1989

En abril pasado la Alianza por la Nutrición (APN), Acción Contra el Hambre y la Alianza Nacional de Organizaciones de Mujeres Indígenas por la Salud Reproductiva, con el acompañamiento de la PDH, presentaron resultados de la situación actual de la vacunación.

El sondeo se llevó a cabo durante el período del 1 al 20 de abril de este año, con información de 682 poblados de 99 municipios que coinciden con los 165 municipios catalogados de alto y muy alto riesgo por el Programa Nacional de Inmunizaciones a febrero. Así también se procedió a entrevistar a 213 establecimientos de salud y a mil 359 madres que presentaron el carné de vacunación de sus hijos menores de 5 años.

Los principales hallazgos del estudio refieren que en cuanto a la cobertura de vacunas contra Sarampión, Paperas y Rubeola (SPR), se ha llegado a niveles incluso comparados a una estimación de 1989, cuando existió un porcentaje de entre 60 y 68 por ciento, mientras en 2015 se llegó hasta un 63 por ciento.

Respecto al riesgo epidemiológico del sarampión, el sondeo señala que se estima que un 30 por ciento de niños sin inmunización se contagia, y de ellos un 15 por ciento está en riesgo de perder la vida. Si el riesgo que la PDH señala por la falta de inmunización llegara a convertirse en realidad, por cada 15 niños que se contagien con sarampión, en quince días, 18 niños más podrían resultar contagiados.

Una de las posibles causas de la baja reducción en las coberturas, podría ser que se estima que de los 2 mil 323 puntos de atención a nivel comunitario, a partir de 2014 se dejaron de desatender a 4.7 millones de personas del área rural.

Respecto a la existencia de las vacunas, la APN determinó a través del sondeo, que la existencia de vacunas en los establecimientos de pentavalente estaba en un 54 por ciento, seguido de Hepatitis B con 65.3, la BCG con 72.8, y Polio OPV con un 79.3 por ciento.

El sondeo también señaló que 7 de cada 10 niños menores de dos años no cuenta con esquemas completos de vacunación, por lo que persiste el desafío en la población hacia el acceso al Derecho Universal de la Salud, principalmente en niños menores de 5 años y mujeres embarazadas que residen en comunidades rurales.

EL ÁREA RURAL ES MÁS VULNERABLE

Adrián Chávez, experto en salud del Instituto de Problemas Nacionales de la Usac (Ipnusac), expresó que las vacunas son importantes porque existe una serie de enfermedades llamadas inmunoprevenibles, dentro de las que se ubica el sarampión, poliomielitis, tos ferina, entre otras; las que cuentan con vacunas especiales que sirven para inmunizar a la población infantil, y cumplen la función de evitar contagios.

Los riesgos de no contar con los esquemas completos, según el entrevistado, hace más vulnerable a la población a ser contagiada con estos padecimientos, criterio que coincide con el de la PDH, al referir el peligro que enfermedades ya erradicadas aparezcan de nuevo. El área rural sería la más vulnerable.

Chávez considera que la falta de presupuesto para la compra de vacunas, también ha afectado al ministerio y ha disminuido su capacidad de alcanzar las coberturas necesarias, aunque no se constituye como el único problema.

“En los últimos años el ministerio ha sido afectado por una serie de decisiones y retrasos de tipo administrativo, que ha comprometido la compra y la distribución oportuna de las vacunas a los distintos servicios de salud. Y en esto además hay que tomar en cuenta la falta de personal, suministros y otros insumos necesarios para llevar a cabo las distintas actividades sanitarias”, apuntó.

VICEMINISTRO ADMITE REZAGO

El viceministro de Salud Rodolfo Zea, explicó a La Hora Departamental, que durante la Semana de Vacunación en las Américas de este año, se tenía una meta de 180 mil dosis de vacunas para administrarse a niños menores de seis meses, y se administraron 173 mil 941 dosis, por lo que se logró un 96 por ciento de la meta que se tenía.

Respecto a los avances en cobertura de vacunación, el entrevistado respondió que aún no se han realizado las coberturas útiles en lo biológico, cuando deberían de llevar hasta el 21 de mayo el 41 por ciento y la mayoría está en un rango de 25 a 35 por ciento.

“Significa –que– a nivel nacional tenemos poco recurso humano para poder vacunar. La gente no está llegando a los servicios a vacunar. Eso es lo que esperaríamos. Nosotros no tenemos más recurso humano para poder ir de casa en casa y colocar el biológico, entonces necesitamos hacer miniconcentraciones en los servicios que prestan la vacunación en cada uno de los departamentos y municipios”, destacó.

Además, señaló que la población tampoco se acerca a los centros de vacunación, por lo que necesitan realizar más promoción, pero la situación económica de la institución también dificulta esa tarea. Afirmó que sí cuentan con abastecimiento de vacunas y admitió que existieron problemas con la del neumococo, pero esto sucedió a nivel mundial.

“Estamos bien abastecidos, tenemos suficiente material y ya se están haciendo las solicitudes para las otras compras que se deben hacer por lo menos de ahora a octubre y noviembre de este año”, dijo Zea, quien recordó que el MSPAS tenía una deuda de Q80 millones con la Organización Panamericana de la Salud por vacunas. El saldo se cancela a través de una cuota de Q10 millones para asegurar el tratamiento biológico para este año. “Ya se pagó la deuda y se dio el anticipo”, afirmó.

La meta de la cartera de Salud, según el viceministro es llegar a la todo el país, teniendo en cuenta que esperan llegar a 1 millón 145 mil 408 dosis para niños menores de un año hasta los cuatro años, aunque una de las limitantes es que no cuentan con recursos para llegar a las regiones más apartadas.

El viceministro aseveró que toda la población que se quedó sin recibir inmunización durante 2014 y 2015, corre riesgo de contraer enfermedades: “son personas que quedaron sin ser cubiertas. Nosotros estamos luchando para que eso no suceda. Sin embargo ya hay casos de tosferina que han ido en aumento, y eso se debe a la baja cobertura que hemos tenido”.

ES UNA MUESTRA REPRESENTATIVA

Al indagar sobre la cifra de menores que quedaron sin vacunación el año pasado, el viceministro afirmó no contar con un dato exacto, aunque de las dosis que se otorgaron en la Semana de Las Américas, se estimó que parte de las mismas estarían dirigidas a esta población.

No obstante, el funcionario refutó la cifra que refiere que 7 de cada 10 niños menores de 2 años no cuenten con esquemas de vacunación completos, y dijo no entender cómo es que obtienen los datos de los esquemas completos.

“Eso es una muestra representativa, no puede ser de todo el país. Nosotros con el sistema de información que tenemos todavía tenemos debilidad para poder sacar eso del esquema completo y estamos trabajando en eso, para saber cuántos niños en realidad tienen su esquema completo”, no obstante no cuentan con datos preliminares.

Finalmente el viceministro reconoció que la vacunación “no va excelente, pero no vamos con cifras tan malas como el año pasado. No estamos en lo óptimo a consecuencia de otros años en donde no se logró las metas de vacunación”, afirmó.

EN DESABASTECIMIENTO

La Jefa de Supervisión Hospitalaria de la PDH, Zulma Calderón aseveró que la vacunación es un tema que no termina de estabilizarse, y que concuerda con un reporte recibido del MSPAS correspondiente al primer trimestre del año.

“Existe en estos momentos desabastecimiento en algunos centros de salud de rotavirus y algunos de la vacuna del neumococo, lo que nuevamente es un reflejo de toda la mala administración que ha venido con este tema”, indicó.

Desde 2014 a la fecha se han tenido las coberturas más bajas, desde que está vigente el esquema de vacunación, y este año no se ha logrado ver mejoría, y si no se registran esfuerzos no se obtendrán mejoras en el cumplimiento de la meta.

Lo peor que podría pasar, de acuerdo a la representante del magistrado de conciencia, es que ocurran brotes y epidemias de las enfermedades erradicadas, y que sumado a la problemática de la salud “si nos llega a dar un brote de sarampión con los altos índices de desnutrición y el abandono que ha estado el primer nivel de atención, para el país sería desastroso”.

El Procurador de los Derechos Humanos, Jorge de León Duque, expresó que es inaceptable la cifra de niños que no goza de esquemas completos de vacunación, lo que significa que hay medio millón de niños con riesgo mortal.

De León afirmó que ese resultado es derivado de años de irresponsabilidad, de no cumplir con la obligación de vacunar y que “los datos siguen siendo escalofriantes y con riesgos inminentes”.

Adonay Cajas, técnico de la Alianza por la Nutrición, explicó que las organizaciones que trabajaron en el sondeo presentado sobre la situación de la vacunación, se trabajó con el acompañamiento de la PDH, para lograr la validación del estudio; “siempre dudan cuando hacemos este trabajo de campo a las autoridades correspondientes”.

EL ESQUEMA DE VACUNACIÓN

Durante las primeras 24 horas de vida, los recién nacidos deben recibir las vacunas contra la hepatitis B y la denominada BGC. A los dos meses se puede aplicar la primera dosis de la vacuna contra la polio, la pentavalente, rotavirus y neumococo. A los cuatro meses debe recibir la segunda dosis de las ya señaladas. A los seis meses de vida, la tercera dosis de polio y pentavalente y luego al año, se debe vacunar contra el sarampión y neumococo.

DATOS Y CIFRAS

• La inmunización previene enfermedades, discapacidades y defunciones por enfermedades prevenibles mediante vacunación, tales como el cáncer cervical, la difteria, la hepatitis B, el sarampión, la paroditis, la tos ferina, la neumonía, la poliomielitis, las enfermedades diarreicas por rotavirus, la rubéola y el tétanos.
• La cobertura vacunal mundial se mantiene en general con firmeza.
• El uso de vacunas nuevas o infrautilizadas está aumentando.
• En la actualidad, la inmunización evita anualmente entre 2 y 3 millones de defunciones.
• No obstante, se estima que 18.7 millones de lactantes de todo el mundo aún no reciben las vacunas básicas.

EN EL MUNDO

La inmunización previene cada año entre 2 y 3 millones de defunciones por difteria, tétanos, tos ferina y sarampión. La cobertura vacunal mundial —la proporción de niños de todo el mundo que reciben las vacunas recomendadas— se ha mantenido estable en los últimos años.

Durante 2014, se administraron tres dosis de la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tos ferina (DTP3) al 86% de los niños de todo el mundo (unos 115 millones), a fin de protegerlos contra graves enfermedades infecciosas que podrían provocarles trastornos y discapacidades graves, e incluso la muerte. Para 2014, 129 países habían alcanzado por lo menos el 90% de cobertura con la vacuna DTP3.

Principales retos

A pesar de los progresos logrados en el último decenio en materia de cobertura vacunal mundial, aún persisten disparidades regionales y locales como consecuencia de:

• Recursos limitados.
• Prioridades sanitarias concurrentes.
• Gestión deficiente de los sistemas de salud; y seguimiento y supervisión inapropiados.
• En 2014 se calcula que 18.7 millones de lactantes de todo el mundo quedaron fuera del alcance de los servicios de administración sistemática de vacunas, por ejemplo la DTP3. Más del 60% de ellos viven en 10 países, a saber: Etiopía, Filipinas, la India, Indonesia, el Iraq, Nigeria, el Pakistán, la República Democrática del Congo, Uganda y Sudáfrica.

Es preciso acordar prioridad al fortalecimiento de la vacunación sistemática en todo el mundo, especialmente en los países que albergan el mayor número de niños no vacunados. Es necesario redoblar esfuerzos para llegar a los grupos desatendidos, en particular los de zonas aisladas, entornos urbanos desfavorecidos, Estados frágiles y regiones asoladas por conflictos.

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